Impactar con pestañas voluminosas y abundantes es una efectiva técnica de seducción de la mujer, pero no desmaquillarlas apropiadamente podría producir graves consecuencias a tus ojos. Conjuntivitis, caída de las pestañas y otras inflamaciones de consideración pueden ser evitadas con una sencilla rutina de limpieza que solo hay que proponerse cumplir.
Hacer contacto visual con alguien no solo es tratar de ver lo profundo de su alma. Ciertamente, los ojos comunican muchas cosas sin necesidad de palabras, sin embargo, así como expresan, también se encargan de mostrarnos y proveer información importante de todo lo que sucede alrededor. Cuidarlos es imprescindible para poder gozar de estas dos maravillosas ventanas al mundo.
El maquillaje permite resaltar todo lo que quieres decir con tu mirada, y las mujeres lo saben muy bien. Acentuar las características de forma y color de los ojos las hace impactar viéndose más atractivas. Las pestañas, en particular, juegan un rol destacable en esto. Decorarlas, alargarlas o hacerlas ver más voluminosas está muy bien. No obstante, olvidar o no retirar correctamente el rímel antes de ir a dormir puede terminar con delicadas consecuencias dermatológicas y oftalmológicas.
Efectos secundarios
Es muy fácil entender esa noche en que se llega muy tarde de un evento y solo quieres ir directo a la cama a dormir. En ese momento, piensas y te dices que una sola noche sin desmaquillarte no puede causar tanto alboroto. Pues, si se habla de la piel, tienes toda la razón. Los efectos secundarios por la obstrucción de los poros de tu rostro por una noche no van a desencadenar arrugas o acné de manera inmediata, pero si dejas de hacerlo a diario el envejecimiento y daños en tu piel serán evidentes muy pronto.
Por otra parte, no puede decirse ni esperarse lo mismo por cada noche que no se retire el maquillaje de tus ojos, especialmente, el rímel y el delineador. Frotar tus ojos dormida con tus dedos o con la misma almohada puede hacer que partículas muy pequeñas entren a ellos. La consecuencia inmediata al despertar será un enrojecimiento y ardor significativo o la obstrucción de las glándulas sebáceas que termina en los dolorosos e incómodos orzuelos. Si todo esto puede pasar por una sola noche, piensa en los resultados negativos de varias o de años sin hacerlo.
25 años de rímel y pestañas postizas
Australia impactó al mundo con la historia de una mujer de 50 años quien, tras no soportar la sensación de tener arenilla en los ojos, acudió al médico especialista terminando en una intervención quirúrgica que, lamentablemente, no pudo evitar cicatrices de por vida en sus párpados y córnea. ¿Cuál fue la razón? El uso por más de 25 años continuos de pestañas postizas y maquillaje en ellas sin una adecuada rutina de limpieza y extracción.
Cosmetólogos y dermatólogos explican que no solo son las micropartículas que se liberan propias de los elementos químicos del maquillaje las que entran en contacto con la parte interna o conjuntiva del ojo. De igual forma, todos los residuos de polvo recogidos durante el día afectan. Las consecuencias de tener una rutina de belleza solo para maquillarse, pero no para limpiar y liberar al rostro de impurezas salen tarde o temprano.
En el caso de esta mujer, el uso permanente de máscaras alargadoras sin una adecuada limpieza produjo la inflamación severa y el agrupamiento de macrófagos pigmentados que no tuvieron otra solución que una delicada cirugía. Su conjuntiva evidenciaba solidificaciones que alcanzaron tal magnitud que rozaban su córnea produciendo la insoportable sensación arenosa y desagradable irritación. Tomó 90 minutos a los oftalmólogos la extirpación de estos bultos y así evitar la progresión de una condición que podría haber causado secuelas más dramáticas.
Desmaquillarse como rutina
Si definitivamente eres de las mujeres que sabe que el sueño la vence y no puede cumplir con todos los pasos para desmaquillarse en la noche, entonces las almohadillas o toallitas no pueden faltar junto a tu cama. Sin embargo, con todo lo expuesto, debes tener claro que limpiar los ojos solo de esta manera no puede convertirse en una rutina.
Dicho todo lo que no deberías hacer, volquemos la mirada ahora a unos tips que te ayudarán a tener una buena técnica para desmaquillar tus ojos correctamente. Lo primero que hay que cuidar es la delicadeza con que ejerces presión para limpiar tus pestañas. Los movimientos sugeridos van de adentro hacia afuera manteniendo solo esta dirección para evitar traer restos de maquillaje hacia el ojo.
Asegúrate de que el producto que escojas para limpiar tus pestañas y ojos sea hipoalergénico. Los más recomendados son los productos bifásicos que tienen el porcentaje perfecto acuoso y oleoso con efectividad comprobada en rímeles de larga duración como los de a prueba de agua. Hay algunos que ofrecen vitaminas fortificantes para que tus pestañas se nutran mientras las limpias.
Igualmente, la utilización de un disco de algodón por cada ojo es lo más recomendable. Si lo humedeces levemente, puedes evitar que libere pelusas. Puedes impregnarlo con el producto y dejarlo unos segundos sobre las pestañas antes de comenzar los movimientos para eliminar el maquillaje. Recuerda también tus pestañas inferiores. Limpia hasta que observes que el algodón ya no queda con manchas o restos.
Pestañas cuidadas, hermosas y fuertes
Unas pestañas sanas serán unas pestañas hermosas. No se trata de que ahora en adelante no las exaltes con un buen maquillaje que deslumbre. La idea es que no falte esa rutina de desmaquillado, especialmente después de ese evento nocturno donde el brillo en tus ojos es el éxito de una mirada deslumbrante.
Ten en cuenta que unas pestañas sanas repercuten en unos ojos sanos donde no habrá enrojecimiento de ojos, inflamación de párpados, posible potenciación de ojeras y hasta consecuencias tan alarmantes como las comentadas sobre el caso en Australia.
Entonces, cuando te preguntes cuál es el mejor rímel para resaltar unas pestañas hermosas, debes también pensar cuál es la mejor manera de quitarlo para amanecer con pestañas sanas, fuertes y listas para volver a impactar al día siguiente.