El champú sólido no es el más famoso del mercado; sin embargo, es un producto que progresivamente está avanzando en popularidad por sus diversas cualidades, su contribución al medio ambiente y por lo fácil que es fabricarlo desde casa. Con tan solo unos ingredientes y unas pocas horas es posible crear un champú sólido de calidad.
Cuando se habla de champús, probablemente el primer pensamiento de todas las personas es el de una sustancia líquida que suele tener un color característico y un aroma que deja el cabello oliendo delicioso por horas y hasta por unos días, en ciertas ocasiones. Una opción que la mayoría prefiere es el champú de aloe vera, por ejemplo, pues es un gran hidratante, mientras que otros prefieren una alternativa que tenga una fragancia floral que cautive a cualquier persona. Sin embargo, no todos los champús son líquidos y, además de eso, hay quienes prefieren los que no lo son. Pero exactamente, ¿qué son los champús sólidos?
Del líquido a la barra
Un champú solido es una pequeña pastilla, parecida a un jabón, la cual está compuesta de elementos naturales que, al combinarse, actúan en el cuero cabelludo para limpiarlo a profundidad.
Aunque parezca complicado de utilizar, debido a lo acostumbrados que estamos a usar la versión líquida de este producto, este champú natural sin químicos es realmente útil, práctico y fácil de aplicar.
Para lograrlo, solo deberás humedecer el producto frotándolo entre tus manos o directamente sobre tu cabello. Notarás que, después de esto, este empieza a generar espuma. Al obtener la espuma, masajea el cuero cabelludo y extiende el producto hasta las puntas para asegurarte de que tu pelo absorba los componentes y, para terminar, aclara tu cabellera con bastante agua.
¿Por qué es una buena idea utilizar un champú en barra?
Ya sabes que es fácil de utilizar y que, aunque se vea extraño, hace su trabajo. Sin embargo, probablemente aún no sabes por qué deberías utilizar un champú sólido natural para tu cabello. Hay varias razones, de hecho, y cada una de ellas es, probablemente, más importante que la otra.
Una unidad de este jabón natural para el pelo ofrece el mismo contenido que tres botellas de champú líquido de tamaño estándar. De hecho, cada pastilla de champú sólido puede brindar hasta unos 80 lavados, aproximadamente.
Sabiendo que en un solo viaje de carga puede llevarse el contenido equivalente a quince viajes de carga de champú líquido, estarás contribuyendo a la reducción de la huella de carbono al usar el champú sólido. Además, como la pastilla no deja residuos ni envases, no se generan desechos.
Para fabricarse no necesita de componentes químicos dañinos. Por lo tanto, suelen ser opciones adecuadas para personas con piel sensible y cabello débil.
Adicional a todo esto, la mayoría de los champús sólidos tienen un pH neutro que hace posible utilizar el producto en zonas más delicadas, como el área genital y hasta la cara.
Por último, hasta el champú para perros será más difícil de almacenar que el sólido, pues este producto no ocupa espacio y es ligero.
¿Cómo realizar un champú en seco casero?
Si deseas comenzar a utilizar champú sólido y en vez de comprarlo decides fabricarlo, entonces aquí tienes una receta que te servirá para prepararlo.
Es necesario destacar que, aunque existen formas de hacer un champú sólido sin sulfatos, en el caso de esta receta, la inclusión del SCS se requerirá. Aunque es un componente más suave que otros encontrados en el mercado.
De la misma forma, también es posible encontrar un champú sólido sin tensioactivos; sin embargo, para esta receta se ha optado por utilizar tensioactivos naturales que faciliten la fabricación del champú sin añadir elementos químicos a la composición.
Ahora, para empezar, estos son los ingredientes que necesitarás encontrar:
1) 10 gramos de manteca de karité refinada
2) 10 gramos de hidrolato de romero
3) 5 gramos de almidón de arroz
4) 5 gramos de placenta vegetal
5) 2 gramos de aceite de aguacate
6) 5 gramos de arcilla blanca
7) 45 gramos de SCI
8) 10 gramos de SCS
9) 5 gramos de extracto de arroz
10) 3 gramos de aceite de avellana
Si deseas un champú casero para pelo graso entonces es posible cambiar los activos usados en la receta: placenta vegetal y extracto de arroz, por otros elementos naturales que combaten el pelo graso, como extracto de aloe vera o incluso miel.
A continuación, encontrarás una guía con cada paso que necesitarás para fabricar tu nuevo champú sólido.
Comienza a pesar
Como primer paso, es necesario tomar los aceites vegetales y la manteca de karité para poder colocarlos en un recipiente que pueda calentarse.
Enciende la cocina a fuego lento y calienta los ingredientes a baño maría.
Combina los elementos
Toma la arcilla, el SCS, el SCI y el almidón de arroz, y viértelos en un bol con espacio suficiente para ellos.
Mézclalos muy bien y, al hacerlo, comienza a verter sobre ellos la sustancia obtenida después del baño maría.
Añade el resto de componentes
Sin dejar que pase mucho tiempo, procede a incorporar los ingredientes activos de la receta. Se recomienda seguir el siguiente orden: hidrolato de romero, extracto de arroz y placenta vegetal.
Utiliza tu fuerza
Cuando ya tengas todos los ingredientes, comienza a remover la mezcla con fuerza hasta que esta no tenga grumos y se haya formado una pasta fina.
Amasa
Retira la pasta del bol y comienza a amasar. Añade el producto final a unos moldes y presiona para evitar que queden burbujas de aire. Al terminar, simplemente deja que se seque y desmolda tu champú para poder utilizarlo.
Después de realizar todos estos pasos sabrás cómo hacer un champú sólido desde la comodidad de tu hogar. Por esa razón, solo queda investigar sobre las funciones de distintos ingredientes y comenzar a experimentar con ellos, creando nuevos champús que se adecúen a diferentes tipos de cabello.
Gracias a este proceso no solo adquirirás nuevos conocimientos y cuidarás tu pelo, también contribuirás al cuidado ambiental y obtendrás un producto multifuncional, de calidad y con un delicioso aroma.
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